La nueva planta de tratamiento de lana de Tagamanent ya es una realidad. Se trata de un proyecto innovador impulsado por un equipo de personas con una ambición clara: activar la economía circular y dar respuesta al reto que afrontan muchos pequeños ganaderos a la hora de gestionar la lana de sus rebaños. Un recurso que, con demasiada frecuencia, acaba siendo rechazado y convertido en un residuo, a pesar de su gran valor por sus propiedades naturales y por las múltiples aplicaciones y utilidades que ofrece.
Recuperar la lana y transformarla en materiales de valor añadido es un objetivo necesario pero, hasta ahora, difícil de alcanzar. El desmantelamiento de la industria lanera en Europa ha reducido los espacios de transformación disponibles, complicando el aprovechamiento de este recurso local. En este contexto, iniciativas como la nueva planta de pequeña escala de Tagamanent se vuelven esenciales para facilitar la recuperación de la lana local y devolverle el valor que merece.
Desde Girbau LAB, celebramos y agradecemos haber participado en esta iniciativa, contribuyendo con el desarrollo de un proceso específico de lavado de lana que permite aplicaciones de alto valor añadido. Ha sido un placer trabajar junto a Sean Acuña, Ignasi Martinez y todo el equipo del Ayuntamiento de Tagamanent en un proyecto de circularidad tan completo y necesario.
Con esta inauguración, esperamos que Tagamanent se convierta en el primer paso de una red creciente de estaciones de tratamiento de lana a pequeña escala en todo el territorio, impulsando que ganaderos, artesanos y la industria local puedan trabajar con este recurso extraordinario: la lana.
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